Basta con salir a caminar un poco por el centro de la ciudad y sus alrededores, que enseguida nos topamos con la mugre. A veces la vereda está bloqueada con montañas de escombro que nos obligan a caminar en la calle, otras los restos de la limpieza de jardines bloquean totalmente el paso de los peatones y las bolsas negras desparramadas con desperdicios malolientes pueden arruinarnos el paseo.
¿Qué hacer? ¿A quién denunciar?¿Cómo quedarnos callados
ante tanta falta de civismo?